martes, 5 de agosto de 2008

VIH - SIDA

Hay noticias que salen publicadas a las cuales no se les debe modificar nada. Esta es justamente una de ellas, es rica en contenido, importante en información y sumamente clara. Por ello la comparto con Uds. tal cual salió publicada en el diario El País

El 58% tiene sexo sin preservativo
VIH-SIDA. En 2008 se notificaron 181 nuevos casos y en total hay más de 10.500 En 2006 se gastaron US$ 11,7: en la enfermedad Pacientes denuncian carencias sanitarias y discriminación | Analizan por cual vía realizarán la denuncia del tema | Se detectaron 128 casos con esta infección en 2008

X. AGUIAR Y D. FRIEDMANN

Aunque ocho de cada 10 uruguayos sabe que el preservativo previene el VIH-SIDA, el 58% no lo usó en su última relación sexual. En 2008 se notificaron 181 nuevos casos. Ya son más de 10.500 en los 25 años de la enfermedad en Uruguay.

Silvana Santana, de 42 años, se enteró en 1996 que una ex pareja suya había fallecido de Sida. Tiempo después se hizo un análisis. Y le dio positivo. "Pensé que me iba a morir. Sentí rabia, bronca. Pensé, ¿por qué a mí? Primero le eché la culpa a los demás. Después eso se revirtió y me fui amigando con el virus, aunque de a ratos aún me peleo", contó ayer a El País, en el Día Nacional de Lucha contra el Sida.

Silvana trabaja junto a Laura Pérez en la Red Uruguaya de Personas que Viven con VIH-Sida (PVVS). Laura tiene 48 años y hace 17 le diagnosticaron VIH. Quien era su esposo en ese entonces le fue infiel con una persona que tenía el virus. Se contagió y la contagió.

Laura se separó. Comenzó a tratarse, sobre todo impulsada porque tenía una hija pequeña. Ahora preside la (PVVS).

"Vemos que públicamente el VIH-Sida es algo de lo que no se habla. Por ejemplo, ningún político habla del Sida. Estamos en eso como en los comienzos. Queremos que se hable, que se nos acepte como seres humanos", afirmó Pérez. Y agregó: "Nos sentimos tratados como raros, como `sidosos`. Eso nos ofende y nos daña".

Si bien ella no sufrió discriminación a "grados críticos" -sí alguna mirada rara o un trato distinto- la padecen otros portadores. Algunos fueron echados de sus casas por sus familias, otros tuvieron problemas en sus trabajos, incluyendo hasta ser despedidos.

Para Marisol Álvez, también integrante de la Red, hay que considerar también dentro de la población discriminada a "las mujeres que se hacen cargo de niños huérfanos de Sida o del cuidado de seres queridos infectados, que si bien no tienen el virus, llevan el estigma".

Dijo además que "entre pasillos" se presiona a las mujeres con Sida a abortar. "Despenalizar el aborto garantizaría el derecho a la maternidad, una decisión informada, sobre todo a las mujeres VIH positivas", dijo Álvez ayer, en el acto central de conmemoración en el MSP.

La PVVS pretende que se difunda más la enfermedad, cuestiona el uso de algunos medicamentos copia que se les están suministrando en Salud Pública (ver nota aparte) y advierte sobre serios problemas en el Instituto de Higiene, donde reciben tratamiento.

"No tenemos oxígeno central, los exámenes de laboratorio se envían al Pasteur, faltan insumos, están las mismas camas que hace 20 años, no hay silla de ruedas y cuando llueve se inunda todo", enumeró Pérez. Las carencias persisten, aunque el Estado destina cerca de $ 100 millones a la atención y tratamiento del Sida, según un estudio presentado ayer, realizado por la Universidad Católica y el MSP.

Los fondos públicos se destinan mayoritariamente al tratamiento, mientras que la mayor parte del gasto en prevención es realizado por los hogares, a través de la compra de preservativos. En total, en el año 2006 se gastó en la enfermedad $ 281,7 millones (equivalentes a US$ 11.707.000), repartida casi en partes iguales entre recursos públicos y privados, más el aporte proveniente de fondos internacionales (ver recuadro).

UNO POR DÍA. En Uruguay se notifica en promedio un caso de VIH-Sida por día, una tendencia que se mantiene en los últimos años. De todos modos, las autoridades entienden que puede haber un importante subregistro ya que se contabilizan sólo los casos que son notificados. Actualmente, 52,8% de las personas que se infectaron por vía sexual son heterosexuales, y un tercio de los casos de VIH notificados son mujeres.

El primer caso tratado en Uruguay ingresó a la Clínica de enfermedades infecciosas hace 25 años. Era un ciudadano uruguayo, residente en Nueva York, al que se le había diagnosticado la enfermedad en Estados Unidos. "Estaba gravemente enfermo, y decidió regresar a Uruguay. Tenía un extremo deterioro, adelgazamiento importante", recordó Eduardo Savio, director de la cátedra de enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina. Murió a los ocho días de la internación, por inflamación de colon.

A su alrededor se instalaron "medidas de aislamiento de varios tipos, porque sabíamos que era una enfermedad mortal y no sabíamos cómo se transmitía. Usábamos tapabocas, guantes y sobretúnicas", dijo Savio.

"Recuerdo la insistencia de los medios por verlo y entrevistarlo, lo que no permitimos por su privacidad y porque él lo solicitaba, porque lo vivía como estigmatizante. Venía del epicentro de la epidemia, donde había un movimiento muy hostil contra los enfermos", contó.

Posteriormente, hubo una gran demanda de consultas de parte de poblaciones de riesgo por temor a estar enfermos, aunque recién se volvió a detectar otro caso en 1986. "Unos años después aparecieron nuevos casos, que eran de pacientes mutuales pero los mandaron a la cátedra porque era una patología muy poco conocida y ningún hospital o centro quería atenderlos, lo que por un lado fue bueno porque nos permitió acumular experiencia".

Al principio existía un tratamiento para la infección, que se diagnosticaba en un grado avanzado de enfermedad. "En 1986 se empezó a tratar con AZT, acá y en el mundo, pero no había grandes mejorías y tenía muchos efectos colaterales. Recién en 1996, cuando se comenzó a aplicar la triple terapia, cambió la historia de la enfermedad. Hoy es una enfermedad crónica, que puede ser contenida y manejable", señaló.

El 71% se contagió el vih-sida por vía sexual y el 25% por vía sanguínea

CUÁNTOS Desde 1983 se diagnosticaron 10.574 casos, de los cuales 7.400 son portadores de VIH y el resto desarrolló el Sida. En lo que va del año se notificaron 181 nuevos casos. Se supone que hay un importante subregistro.

QUIÉNES Un 69% de los casos son hombres, y un 77% reside en Montevideo. El 52,8% de los infectados por vía sexual son heterosexuales, 16,6% bisexuales, 27,5% hombres homosexuales y 3,1% trabajadoras sexuales.

CÓMO Un 71% se contagió por vía sexual, un 25% por vía sanguínea y un 4% por transmisión vertical (de la madre al hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia).

INFORMACIÓN Entre la población general, el 70% de las personas señalan que las relaciones sexuales son una vía de transmisión del VIH/Sida, pero no se tiene tan claro que también lo es el compartir elementos punzantes como las jeringas. Además, 80% reconoce el preservativo como forma de prevención, pero 58% no lo usó en su última relación sexual. Un 23% de las mujeres y un 28% de hombres señalan como método para evitar el contagio el conocimiento sobre la persona con la que se tiene relaciones se-xuales, según el estudio Información, percepciones y prácticas en ITS y VIH, 2007 - 08 de Equipos Mori.

EQUIVOCADOS Un 19% piensa que el VIH se transmite por la picadura del mosquito y 10% no sabe qué contestar. Un 14% considera que se transmite compartiendo el mate. Un 25% no sabe que también se puede transmitir de forma vertical. Además, un 30% piensa que la sífilis ya no existe, 21% que no tiene cura y 41% desconoce que se puede transmitir de forma vertical, según la encuesta de Equipos Mori.

EDUCACIÓN Ayer se presentaron unas valijas didácticas para la educación y promoción de salud sexual, donadas por la cooperación internacional de Alemania. Las valijas incluyen muñecos sexuados, modelos en plástico de los órganos genitales, paneles con información acerca de las formas en que se transmiten las enfermedades de transmisión sexual y en las que no, para motivar el diálogo y la prevención y combatir la discriminación.

GASTO En 2006 el gasto en SIDA fue de $ 281,7 millones, según el Informe de Medición de Gastos Sida realizado por la Universidad Católica. De los $ 138 millones que provienen de fondos públicos, se destinó 99 al tratamiento, 23 a la prevención y 13 a servicios sociales. De los $ 135 millones gastados por privados, 117 fueron destinados a la prevención (fundamentalmente a través de la compra de preservativos), y 17 a tratamientos. Los casi $ 9 millones de fondos internacionales, se destinaron: 5 a prevención, 3 al fortalecimiento de programas y 0,1 a la investigación.

Pacientes padecen efectos de "copias"

Pacientes con VIH denuncian que medicamentos copias que les son suministrados por el Ministerio de Salud Pública (MSP) les producen efectos adversos como diarreas, aumento de colesterol y pérdida de conocimiento, dijo a El País Laura Pérez, presidenta de la Red Uruguaya de Personas que Viven con VIH-Sida (PVVS).

Un fármaco original es un producto medicinal que contiene una nueva molécula que pasó por todas las fases de desarrollo, mientras que una copia tiene el mismo principio activo que el anterior pero no tiene licencia por lo que no fue analizada por la Organización Mundial de la Salud.

El año pasado pacientes de PVVS presentaron dos recursos de revocación a una licitación del MSP que compró copias, informó "Búsqueda". Esa acción fue rechazada y lo mismo sucedió con un recurso de amparo que presentaron. "Este recurso fue rechazado por ausencia de denuncia de efectos adversos. Ahora tenemos las denuncias. Hay pacientes incluso que han dejado el tratamiento. Estamos evaluando que acciones vamos a tomar", dijo Silvana Vila, abogada de los pacientes.

Fuente: diario El País

Vea también:
Enfermedades de transmisión sexual
Sida

2 comentarios:

gaia dijo...

Acerca del artículo publicado en diario El País creo que sí hay que modificar, al menos ese periódico debería tener la ética de responder cuando alguien le hace críticas o comentarios a sus artículos, es ese medio uno entre otros a los que hago refeencia en mi ponencia del 29 de julio en el acto central del MSP, cuando digo "En cuanto a la calidad de los medicamentos, para que realmente esté asegurada, y quienes los tomamos podamos siempre sentirnos seguros y seguras y no nos alarmen los sensacionalismos amarillistas que algunas veces resuenan en algunos medios de comunicación,..."
Texto del correo que mandé a EL PAÏS:
"Necesito la dirección de correo electrónico de quien corresponda, pues quierop solicitar Derecho de Réplica ya que mi nombre apareció publicado vinculándome a mi condición de seropositiva sin que nadie me pidiera autorización, y el DERECHHO A LA CONFIDENCIALIDAD, como lo define las Recomendaciones csobre DDHH y VIH/SIDA de ONU acatadas por nuestro País, significa que aún revelando ante una cámara o un auditrio mi diagnóstico, solamente yo tengo derecho a decirlo y quien lo repita sin mi autorización está vulnerando mi derecho. Además se menciona algunas cosas que dije, sin contextualizarlas y en el mismo artículo se incluyen opiniones acerca de antirretrovirales que yo estoy políticamente en desacuerdo y npo queda claro que no participo de esa opinión, vincularme a ella es además una difamación.
Agradecería se me responda a la brevedad.
Atte.
Marisol Alves Serra (Punto Focal en Uruguay del Movimiento Latinoamericano y del Caribe de Mujeres Positivas, Coordinadora del Grupo Esperanza y Vida, Miembro titular de CONASIDA-MCP"

gaia dijo...

A continuación publico el texto completo de lo que presenté el 29 de julio, para que se tenga la oportunidad de comprender lo que quise expresar sin recortes descontextualizados de medios amarillistas, pues no estoy en contra de la política de salud que lleva adelante este Gobierno, simplemente quise hacer una alerta a las autoridades para que sepan que hay mucha gente que está tirando para atrás, yo no soy desclasada ni nada que se le parezca, se perfectamente que "el enemigo no está gobernando" pero quizás si está en muchos puntos donde se toman desiciones y se deberían aplicar las reformas y cambios que sew están aprobando.
El texto completo dice:
Lo que plantearé lo haré desde la mirada de la parte de la CONASIDA (Comisión Nacional de Sida) integrada por la Sociedad Civil, y muchas cosas desde la perspectiva de las personas que en este país vivimos con vih o con sida.
25 años, un cuarto de siglo es el tiempo que ha transcurrido desde aquel 29 de julio en el que se diagnosticaba el primer caso de vih en nuestro País.
Desde entonces hasta hoy, se han realizado muchos esfuerzos y avances para detener la epidemia, brindar apoyo, contención y tratamiento a las personas afectadas. Pero a pesar de los esfuerzos queda muchísimo por hacer, lo principal, es lograr que todas las normativas y medidas que promueven la protección de los DDHH de quienes vivimos y convivimos con vih o con sida, y de nuestro entorno, sean una realidad en todo el territorio nacional y para todos y todas.
Hoy, nos encontramos en medio de un proceso de cambios en muchos aspectos políticos que promueven mayor equidad a toda la población, y sin duda, éstos cambios, a mediano y largo plazo, podrán ayudar a disminuir las nuevas infecciones de vih y las muertes a causa del sida, pues, esos cambios apuntan a atacar muchas de las causas y o consecuencias sociales, culturales, políticas y económicas de la epidemia, pero la vida transcurre hoy, y hoy, cuando bajamos a la cotidianeidad, nos enfrentamos cara a cara con personas que, habiendo recibido un diagnóstico positivo de vih o que ya han desarrollado el sida, en todos los rincones del país, continúan luchando para sobreponerse a la muerte civil y a los impactos negativos del estigma y la discriminación, personas que cuando tienen la suerte de acceder a la información acerca de sus derechos ciudadanos, o específicamente sus derechos como personas vih+ ó con sida, experimentan muchas veces esa especie de angustia que causa saber que el derecho existe, pero en ese contexto particular no se aplica, ó si se profundiza, en algunos casos, se descubre que el derecho existe para otras personas en otros lugares del País, pero no allí concretamente.
Para cambiar esta realidad se hace necesario e imprescindible un verdadero proceso de descentralización, que no esté pensado desde el centralismo montevideano, ni desde ámbitos centralizadores del interior, sino, una descentralización que esté pensada y planificada teniendo en cuenta las diversas realidades de diferentes lugares del interior, y de cuyo proceso participen, efectivamente, quienes luego se beneficiarán con él, en este caso concreto, que participen las personas que vivimos y convivimos con vih o con sida y las organizaciones que nos defienden y nos apoyan, no decidan por nosotros y nosotras, escuchen nuestras voces y ténganlas en cuenta de verdad.
Hagamos un breve listado, a modo de ejemplo, de algunas cuestiones relevantes para brindar, como país, una respuesta positiva al acceso universal a las pruebas, la atención, contención, apoyo y tratamiento a las personas afectadas, que por sentido común deberían estar resueltas, y sin embargo no las sentimos como realidad en nuestra propia piel, en el día a día, en la vida real, fuera del ámbito de papeles y resoluciones que se firman y se aprueban, pero no siempre se pueden asegurar o controlar que se cumplan en todo el territorio nacional:
Por ejemplo:
Se debería realizar consejería pre y post test y de ser posible también consejería inter par. ¿Cómo asegurar este requisito para la realización del test cuando en nuestro país si bien el consentimiento debe ser informado no se requiere que sea firmado? Es un hecho, que a muchas embarazadas se le realiza el test como una rutina más y algunas veces ni siquiera se le habla acerca del vih, solo se incluye el pedido del test en medio de otros tantos, garabateado de tal forma que ni siquiera se tiene idea de para qué se le extrae la sangre. También se conocen casos de pruebas compulsivas y por ende sin consejería realizada a personas que se internan por uso abusivo de sustancias y aún, se solicita el test como requisito de ingreso al mercado laboral, tanto en el ámbito privado como en algunas áreas del Estado (Ministerio del Interior y Ministerio de Defensa). ¿Es posible garantizar la consejería cuando no es posible controlar las pruebas compulsivas? ¿Si el consentimiento no es firmado, cómo se garantiza que éste haya sido informado? ¿Qué ocurre con los test realizados en laboratorios privados fuera de los centros asistenciales?
La confidencialidad de la prueba está garantizada jurídicamente, pero sin embargo en algunos lugares, al manos del interior, el resultado lo conoce primero la familia y parte de la comunidad y luego la persona que se realizó la prueba y nunca queda claro dónde y cómo denunciar esta vulnerabilidad del derecho a la confidencialidad.

Estos 2 ejemplos representan parte de los obstáculos al acceso a las pruebas, y si la gente no se la hace para conocer su estado serológico, la epidemia continuará creciendo en Uruguay
Otro ejemplo, en Uruguay se ha avanzado en lo referente al acceso universal a las terapias antirretrovirales, y el vih y el sida ameritaron ser considerados prioridad dentro del MSP, razón por la cual el Programa Nacional ha adquirido el status de prioritario, a pesar de ello, no ha sido incluido en la lista de condiciones crónicas de salud que recibirán atención y tratamiento gratuito en el ámbito de la salud privada.
Un ítem importante para asegurar el acceso universal es tener en cuenta que el tratamiento no solo implica el acceso a los antirretrovirales sino también a todos los medicamentos para infecciones o enfermedades oportunistas y las pruebas de monitoreo, en algunos lugares, suele haber desabastecimiento de éstos medicamentos para las oportunistas y no siempre las personas disponen de recursos para comprarlos, fundamentalmente las personas que poseen carnet de asistencia gratuita del MSP.
Aún logrando la optimización del acceso universal, éste no tendría buenos resultados si no se fomenta la adherencia, y esto solo será posible, a nuestro entender, si se incluye la educación en tratamiento como parte de la conserjería post test en personas que reciben resultado positivo del mismo. La educación en tratamientos, no sólo fomentaría una mayor adherencia sino que también es una pieza clave en el empoderamiento de las personas afectadas.
En cuanto a la calidad de los medicamentos, para que realmente esté asegurada, y quienes los tomamos podamos siempre sentirnos seguros y seguras y no nos alarmen los sensacionalismos amarillistas que algunas veces resuenan en algunos medios de comunicación, para que esto ocurra, es necesario que la sociedad civil tenga un espacio, al menos de observador, en la comisión que decide la compra cada vez que se realice un llamado a licitación.
Se ha implementado un sistema de fármaco vigilancia pero no se ha contemplado aún la participación del sector comunitario y si bien es de fácil acceso vía Internet el formulario está diseñado en un lenguaje técnico de difícil comprensión para la ciudadanía en general, sin contar que no es muy difundida la existencia de este sistema y que muchas personas no tienen acceso a internet, y èstos formularios no están disponibles en todos los centros asistenciales del país.
Se ha aprobado el Plan de igualdad de oportunidades y derechos de las mujeres, y en el mismo, las mujeres vih+ estamos contempladas como “personas en situación de discriminación agravada” pero no se han implementado políticas de inclusión social específicas para mujeres vih+ ó afectadas por la epidemia como pueden ser las tantas mujeres anónimas que se hacen cargo de niños, niñas y adolescentes huérfanos del sida y ó se encargan del cuidado de sus seres queridos que se han infectado con el vih o que ya han desarrollado sida, que si bien son mujeres que no tienen el virus en su sangre, sí tienen el estigma del virus en sus vidas.
Es un hecho que Uruguay no escapa al fenómeno global de la feminización de la epidemia, y este proceso se acentuará en la medida en que las mujeres, en tanto tales, no tengamos la posibilidad de ejercer uno de nuestros derechos humanos fundamentales que implica decidir sobre nuestros cuerpos, nos pertenecen, no son y no pueden ser objeto de caprichos o moralismos de nadie, mucho menos de legisladores/as, por eso, es imprescindible y urgente la aprobación de la Ley de Salud Sexual y Reproductiva que incluya la despenalización del aborto. Pues es una realidad que muchas mujeres con o sin vih, con o sin sida, por diversas razones, no siempre deciden libre y concientemente cuándo cómo y con quién tener relaciones sexuales. Además, despenalizar el aborto, es una forma de garantizar el derecho a la maternidad, sobretodo de mujeres vih+, pues también ocurre que tras bambalinas, en pasillos y corredores de centros asistenciales, a muchas mujeres vih + se les recomienda abortar y algunas veces hasta se las presiona, si el aborto está despenalizado, nadie tomará esta decisión, por la afirmativa o por la negativa, sin la garantía de que la misma sea totalmente informada, teniendo en cuenta todas las alternativas posibles y sin ninguna presión.
En cuanto a otro de los factores que influyen en la feminización de la epidemia es la violencia hacia las mujeres, dentro y fuera del ámbito familiar. Las políticas orientadas a la disminución de este fenómeno, deberían buscar evidenciar la relación existente entre violencia y vih.
El listado puede continuar, pero lo dejaremos por aquí, y en resumen, creemos que la mejor forma de comprometernos como sociedad civil y como comunidad en la lucha contra el sida, es asumir un rol protagónico en la construcción de una sociedad más sana, más justa, más equitativa, más humana, no violenta, no xenofóbica y no homofóbica.
Para terminar, nuestro mensaje y consigna final es que “la salud es conciencia, libre de culpas, libre de temores, libre de sometimientos” y “la lucha por la salud en un proceso de liberación no es luchar contra la enfermedad sino contra los factores que la generan y la refuerzan”
Gracias.

Marisol Alves Serra